🔹Infórmate y planifica- para que no te agarren cosas de sorpresa! Así podrás controlar los aspectos que están en tus manos. Donde vas tienen cuna? Cama? Dormirán en la misma habitación? Compartirán la cama con su bebé? Mientras mas sepas, mejor te podrás preparar para el viaje.
🔹Procura comenzar las vacaciones teniendo a un bebé/niño descansado. Si está descansado, podrá tolerar mejor el cambio de rutina, horarios, ambiente y logrará adaptarse mejor a los cambios.
🔹Intenta que la rutina para dormir sea lo más parecido a la de casa. Lleven su peluchito/tuto , almohada favorita, white noise, música o libro y hagan la rutina como si estuvieran en casa (o lo mas parecido que se pueda). Eso hará que el cambio sea más fácil y asimilen que es hora de dormir aunque no estén en su casa.
🔹Por estar en un ambiente diferente, puede que le cueste más trabajo dormir y que necesite más de tu ayuda. ¡Está bien! Denles ese apapacho/regaloneo extra, abrácenlos mas, tengan una rutina más larga y un cuento extra. De a poco ve disminuyendo esa ayuda extra que le dieron.
🔹Trata de que duerma siempre en el mismo cuarto y en la misma cama (en medida de lo posible) durante todo el viaje. Esto le ayudará a adaptarse más rápido al nuevo ambiente.
🔹Planea y trata de que las siestas caigan durante el trayecto de tu viaje, así evitas que lleguen cansados al destino final.
Más vale salir temprano (y dormir una siesta extra en el día) que llegar muy tarde y con un niño exhausto.
🔹¡Cuida sus siestas! Como mamá es la parte mas difícil, buscar el equilibrio entre pasarlo bien en familia y tratar de mantener su horario y rutina de siestas. Pero recuerden, que un bebé que duerme en el día, va a estar de mejor humor.
Bebé feliz = familia feliz! Lo mas importante cuiden sus siestas y respeten su sueño nocturno.
Durante las vacaciones, es ideal tener un horario flexible en lugar de un horario estricto. La clave está en el equilibrio.
¡Pásenlo bien y recuerden regresar a su rutina al llegar a casa!